No necesito leer editoriales para saber quién es Macri, tampoco necesito que nadie me diga quién es nuestro majestuoso artista, Rodolfo Fito Páez. Yo tengo pensamiento y opinión propia, puedo darme cuenta con bastante facilidad cuándo hay vocación política y cuándo no.
La política no es una empresa, por lo tanto no necesita de empresarios. La política requiere meditación, reflexión, observación, militancia y acción. Valores que entiendo carentes en el actual Jefe de Gobierno porteño y, según lo que parece, el próximo. Estoy seguro de que nuestro Freddy Mercuri porteño jamás ha participado ni del centro de estudiantes de su secundario, tampoco creo que haya hecho pintadas por la Ciudad en contra de la dictadura genocida que por entonces nos acechaba.
Si existiera el símbolo de la demagogia, seguramente sería la cara de este ex-presidente de la mitad más uno (CABJ), sólo así pudo llegar este vil empresario a donde llegó. Pobre ricachón. Asco. Asco de que tengamos un representante así. Me da asco a mí también. Porque aunque te hayas quitado tu bigote, jamás podrás afeitarte tu facha visión del mundo. Asco. Vos y tu aria juventud PRO de 5 minutos de militancia.
Discriminación?? quien sostenga esto sólo revela la falta de percepción de la realidad. Discriminación es lo que realiza el gobierno de la Ciudad con los negros, los pobres y los locos. Esto fue comprobado, de manera fehaciente, en el transcurso, sólo, de este año.
Gracias, entonces, Fito por tu arte, por tu pensamiento, por expresar tus ideas.
A pocos días de la segunda vuelta: "quién dijo que todo está perdido? yo vengo a ofrecer mi corazón..."
