A llanto pelado
desgarras tus penas
clamando por tu abuela
quien saluda a la ventana.
A dónde te llevará
este bus del olvido.
Después de gritar
desconsolada,
desobedeciendo a tu madre
te calmas y pasas
del llanto
a la risa
como sólo tu,
niña,
puedes.
Y yo
que ahora soy hombre
cuando recuerdo
las nanas de mi vida
sin pausa y sin prisa
paso igual que tu
del llanto
a la risa.
desgarras tus penas
clamando por tu abuela
quien saluda a la ventana.
A dónde te llevará
este bus del olvido.
Después de gritar
desconsolada,
desobedeciendo a tu madre
te calmas y pasas
del llanto
a la risa
como sólo tu,
niña,
puedes.
Y yo
que ahora soy hombre
cuando recuerdo
las nanas de mi vida
sin pausa y sin prisa
paso igual que tu
del llanto
a la risa.
Más lendos sus versos, poeta. :)
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